viernes, 19 de junio de 2009

Desde el balcón del abismo




Desde el balcón del abismo veo desfilar ante mi un mundo de opciones, ajeno a la respuesta, aunque quizá demasiado presente en ella. El laberinto se abre cada vez más y el camino se va convirtiendo en un imposible, un infinito de posibilidades que nunca terminan de resolverse. Un ritmo frenético para un alma acostumbrada a la pausa, demasiada velocidad para tanta indecisión. Quizá este laberinto solo se pueda resolver con la calma, sin atajos. Quizá solo sea cuestión de escoger la salida correcta, la que nos llevará al final. Puede que haya demasiadas respuestas y ninguna sea la correcta. Puede que tan solo haya dos y no sepas escoger la correcta, la que me librará de esta encerrona de la que no se cómo salir, de la que solo tú me puedes sacar.

Tan solo quiero salir, aunque haya que escapar de la norma o la legalidad.

Espero...

1 comentario:

Carmen-Mª López dijo...

¿Cómo salir? ¿Cómo? Tratas de escapar de ese balcón del abismo, de ese balcón en el que la vida diverge en dos extremos y se rompe.
Todo en la vida son decisiones -inequívocas o no- pero al fin y al cabo, decisiones.

Besos y versos.